Una problemática se está presentando en el municipio de Curumaní al sur del departamento del Cesar, donde estudiantes y docentes salieron a las calles a manifestar las carencias que están viviendo dentro de las instituciones educativas de esa población. Al cese de clase de los más de 10 mil estudiantes, se sumaron docentes y padres de familia.
El presidente de ADUCESAR seccional Curumaní, Diofanol Guerra Gutiérrez, manifiesta que desde pandemia el gobierno nacional, departamental y municipal ha dejado en un abandono la educación del departamento del Cesar y en especial el municipio de Curumaní.
“Las instituciones educativas del sector urbano como; Camilo Torres Restrepo, San José y San Isidro con sus respectivas sedes del sector rural, están en precarias condiciones, no cuentan con aseadora, vigilante, los salones no tienen ventiladores, no hay trasporte escolar para la zona rural donde tampoco hay servicio de agua potable”, expreso Guerra Gutiérrez.
Las denuncias frente a las precarias condiciones en las que se encuentran los estudiantes de los colegios de esta población del Cesar, las deja en evidencia una madre de familia que asegura que a sus hijos les toca pagar entre 4.000 y 8.000 pesos para el pago de las aseadoras o si no hacer el aseo, así mismo, aseguro que los estudiantes de segundaria no se están beneficiando del Programa de Alimentación Escolar – PAE.
Ante el cese de actividades se habría presentado en representación de la Secretaría de Educación del departamento del Cesar, Beatriz Jácome, quién se habría comprometido a solucionar el problema de las aseadoras y de vigilancia a más tardar el 15 de mayo, no obstante, frente al tema del PAE, no se llegó a ningún acuerdo. Mientras que el presidente de ADUCESAR seccional Curumaní, aseveró que el tema será discutido con las directivas de la asociación de educadores para buscar soluciones de fondo.